Otro domingo de fuertes precipitaciones golpeó a la capital, dejando más de 100 mm de lluvia, cortes de energía y episodios de socavamientos. A pesar de la intensidad del temporal, la ausencia de la Municipalidad se hizo notar en varios frentes.
Según el subsecretario de Gestión Integral de Riesgos y Catástrofes, José Pedro Ruiz, se registraron 108 mm de agua, lo que provocó situaciones críticas en algunas zonas. Aunque Ruiz mencionó que la transitabilidad en las calles se normalizó en la mañana del domingo, destacó dos incidentes puntuales que requirieron atención urgente.
Uno de ellos ocurrió en el barrio Cichero, donde una familia se autoevacuó debido a un socavamiento que amenazaba su vivienda. Esta situación, que data desde marzo, pone en riesgo la integridad del hogar y resalta la falta de acciones preventivas por parte de la Municipalidad.
El segundo incidente tuvo lugar en el barrio Molina Punta, donde una zanja clandestina causó el hundimiento de una camioneta. Estos eventos evidencian la necesidad de una gestión más eficaz en el mantenimiento de la infraestructura urbana.
Además, cortes de energía afectaron a varios barrios, agravando la situación de vulnerabilidad de los vecinos. Aunque las cuadrillas municipales trabajan en labores de limpieza y desobstrucción de desagües, queda en evidencia la falta de planificación ante eventos climáticos adversos.
Ante cualquier emergencia o reclamo, se insta a los vecinos a utilizar los servicios de atención ciudadana disponibles, pero la ausencia de medidas preventivas continúa generando preocupación en la comunidad. La necesidad de una respuesta efectiva por parte de las autoridades municipales se hace cada vez más urgente para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos.
Invierten tanto dinero en convertir las plazas cementándolas